con El Club de la Memoria
Así es. Este es el último título leído por el Club de lectura «Con aroma a Café» el año pasado. Era 17 de diciembre y no sabíamos cuando podríamos volver a reunirnos para leer en compañía así que mientras tanto, aprovechamos para dar vida a este espacio de encuentro digital que esperamos sirva para poner en común nuestras lecturas y nuestras experiencias en los diferentes clubes de la Red Municipal de Bibliotecas de Gijón. Podremos ver lo que otros leen, participar en sus entradas, enriquecernos con sus comentarios y todo ello sin salir de este blog.
Os dejamos con lo que Chelo recogió ese día. No se nos ocurre una mejor manera de empezar.
No parece que el libro gustara mucho. Solo éramos siete y con Rafa ocho y a todas las presentes, incluido a él, nos pareció una novela floja. La opinión generalizada es que no debería de haberse escrito en primera persona, habría sido mejor que la autora hubiera utilizado la tercera adoptando el papel de narradora y no hubiese recurrido tanto a la teatralización.
Los temas de la novela giran en torno al exilio forzado y a la morriña y la obra, una epopeya biográfica, resultó en general de narrativa pesada aunque fue bien valorada en cuanto a su contenido emocional. También fue considerado un acierto de la autora el hecho de utilizar como punto de partida una fotografía.
El lector se pierde a lo largo del relato y tal parece que la novela sea el ejercicio de un taller de escritura. Se detecta un fallo importante en cuanto a que no se distingue la presencia de los narradores y, en general, el libro es considerado más un «documental» que una verdadera novela.
CHELO